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El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo el sábado que varios funcionarios estadounidenses han estado en contacto directo con el grupo rebelde sirio que encabezó el derrocamiento del presidente Bashar al-Assad, al que Estados Unidos y otros países han designado como una organización terrorista extranjera.
Blinken es el primer funcionario estadounidense en confirmar públicamente los contactos entre el gobierno del presidente Joe Biden y Hayat Tahrir al-Sham, o HTS, que lideró una coalición de grupos armados de oposición que derrocaron a Assad el domingo pasado.
En una conferencia de prensa en Aqaba, Jordania, Blinken no quiso revelar detalles de los contactos, pero dijo que era importante que Estados Unidos transmitiera mensajes al grupo sobre su conducta y la forma en que pretende gobernar en un período de transición.
“Sí, hemos estado en contacto con HTS y con otros grupos”, dijo Blinken. Añadió que “nuestro mensaje al pueblo sirio es este: queremos que tengan éxito y estamos preparados para ayudarles a lograrlo”.
Desde 2018, el Departamento de Estado designó a HTS, que alguna vez fue una filial de Al Qaeda, como una organización terrorista extranjera. Esa designación conlleva severas sanciones, como la prohibición de proporcionar cualquier “apoyo material” al grupo o a sus miembros. Sin embargo, las sanciones no impiden legalmente que los funcionarios estadounidenses se comuniquen con los grupos así designados.
